Inventario

Revista literaria y artística escrita y dirigida por Fernando Loygorri

Diccionario de música, mitología, magia y religión. Ramón Andrés. Editado por Acantilado. 1ª edición. Año 2012


Partitura de Johann Mattheson para flauta dulce
Partitura de Johann Mattheson para flauta dulce
DO MAYOR: Tiene un carácter algo rudo y audaz, pero no es impropio para expresar la alegría y dar rienda suelta a la felicidad. Un compositor de talento puede escribir con esta tonalidad algo ciertamente atractivo, sobre todo si se escoge bien los instrumentos del acompañamiento; con ella puede conseguir crear pasajes de un clima tierno.

DO MENOR: Es una tonalidad extremadamente dulce y a la vez algo triste, aunque prevalece en ella la primera cualidad. Esa misma dulzura, para que no nos induzca a cierta somnolencia, conviene sazonarla con pasajes animados.

RE MAYOR: Es apropiado para expresar situaciones felices o bélicas, idóneo para tañidos. Su tonalidad, pese a ser dura, es susceptible de ser empleada con acierto como introducción a una obra de carácter delicado, o bien a ciertos pasajes, cuando una flauta reemplaza al clarino (trompeta), o un violín a los timbales.

RE MENOR: Al examinar esta tonalidad se descubre que tiene algo de devoto, tranquilo, y parece acorde con algo grande y convincente. Es capaz de contribuir a la devoción en la música religiosa y a la paz de espíritu, aunque no debe olvidarse que también es apropiada para la diversión y expresión de fluidez.

MI b MAYOR: Contiene en sí mucho pathos; su naturaleza la lleva a ser únicamente idónea para las obras serias y tristes. Se diría que es reacia a toda sensualidad.

MI MAYOR: Expresa incomparablemente bien una tristeza irremediable o absolutamente fatal. Es la más utilizada para manifestar la impotencia o la desesperanza en el amor, y puede transmitir algo punzante, desgarrador, doloroso y penetrante, que en nada puede compararse con la ruptura entre el cuerpo y el alma.

MI MENOR: Difícilmente se puede asociar a lo alegre, puesto que es, por lo común, una tonalidad pensativa, profunda, desolada y triste y encierra cierta aspiración al consuelo.

FA MAYOR: Es capaz de expresar los más bellos sentimientos, generosidad, constancia, amor, todo aquello que ocupa un lugar elevado en la escala de cualidades; y se consigue del modo más fácil, no es necesario ningún esfuerzo. En verdad, la belleza y la oportunidad de esta tonalidad puede compararse con una buena persona que, haga lo que haga, aunque sea algo sin importancia, lo hace perfectamente.

FA MENOR: Expresa la ternura y la calma, a la vez que una profundidad y una gravedad no muy alejada de la desesperanza, una fatal ansiedad del alma. Transmite una melancolía negra e incurable, y a veces puede incitar al oyente al horror o al escalofrío.

FA # MENOR: Aun comportando también una gran tristeza, es más lánguida y amorosa que mortal. Al margen de otras consideraciones, tiene un algo de contenido, extraño y neurasténico.

SOL MAYOR: Tiene mucho de sugestivo y retórico, y aunque no brilla por lo que aquí se afirma, se emplea tanto para lo alegre como para lo serio.

SOL MENOR: Es tal vez la más bella de las tonalidades, y no sólo porque -por la relación con las tonalidades precedentes- es capaz de mezclar con gracia lo serio y lo marcadamente dulce, también aporta un carácter extremadamente gracioso y agradable, ya que, al ser sumamente maleable, se presta a lo tierno y a lo remansado, al deseo ardiente y a lo divertido. En definitiva, es útil tanto para lamentarse como para mostrar una alegría moderada.

LA MAYOR: Muy conmovedora y a la vez brillante, su naturaleza la inclina a expresar mejor las pasiones tristes que las cosas divertidas. Se adapta particularmente bien a la música para violín.

LA MENOR: Su naturaleza encierra algo de lastimero, de resignado y digno, invitando al sueño, lo que la hace en cierto modo enojosa. Se utiliza especialmente en la música de tecla e instrumental.

SI b MAYOR: Se trata de una tonalidad muy divertida y suntuosa; tiene también un tinte de modestia pero al mismo tiempo puede pasar por majestuosa y delicada.

SI MAYOR: Parece tener en sí misma un carácter agresivo, duro y desagradable, a la vez que desesperado.

SI MENOR: Es una tonalidad bizarra, sombría y melancólica, razón por la cual se usa raramente.

Comentarios de Johann Mattheson (1681-1764) del capítulo 2º Von der musikalischen Thone Eingenschaft und Würckung in Ausdrückung der Affecten de su libro Das Neu-Eröffnete Orchestre de 1713.

Las tonalidades en DO # MAYOR, DO # MENOR, MI b MENOR,  FA # MAYOR, LA b MAYOR, LA b MENOR y SI b MENOR  todavía eran inusuales y por ello no se comentan.

Invitados

Tags : Sobre la música Redactado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 31/01/2013 a las 10:14 | Comentarios {3}



Comentarios

1.Publicado por César el 01/02/2013 00:35
Ya lo decía Ramón en cuclillas entre las espigas: "Este año la hierba mocea mucho más agudo que el pasado"

2.Publicado por Roberto Reffray el 04/04/2016 05:15
Buenas noches. Estoy haciendo una tesis sobre la traducción del Dichterliebe de Schumann. ¿Me podría decir las páginas de las cuales fueron tomados estos datos sobre la tonalidad de los afectos, de Ramón Andrés? Gracias.

3.Publicado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 04/04/2016 12:42
Hola Roberto:
En la entradilla del artículo viene el libro de Ramón Andrés que es su Diccionario de música. En la entrada AFECTO podrás encontrarlos. En la edición de Acantilado corresponde a las páginas 35-36. Un saludo.

Nuevo comentario:







Búsqueda

RSS ATOM RSS comment PODCAST Mobile