En lo alto de la Montaña piensa Cima de Montaña. Ha habido un instante de cercanía con el sonido de un cencerro, abajo, en el valle. Hasta él ha subido. Luego ha caído desmayado víctima de la necesidad. Al despertar ha sentido las siguientes palabras: "Amordazadme, ¡Oh, Dioses venturosos!, calladme para siempre los labios; cosedlos con puntadas de oro; aconsejadme este silencio de alturas; mareadme con la falta de alimento pero no permitais, no, que vuelva mi vista a las llanuras donde los arrozales crecen y el hambre se sacia al instante. Hay en este aire purísimo, en esta ausencia de alimento y agua, en el lúgubre estar sobre la cima, el candor de la ilusión de lavarme así, para siempre, mis culpas ¿Cuáles fueron? ¿Habré de enumerarlas? ¿Habré de decirlas de viva voz? ¿Y si mi memoria no alcanza? ¿Y si el peso de la ley humana cae sobre mí como sobre la mujer cuando es detenida por hollar una tierra privada? ¿Hay lamento más grande que pisar la tierra que nunca será tuya? ¿Hay culpa más horrenda que ésa? ¡La tierra que no es tuya! ¡La inmensa riqueza que esconde! ¡La tierra que no es tuya! Tras el horizonte de mi aldea. Quizás allí comience esa tierra. Quizás yo asistí a la guerra por conquistarla como hicieron los griegos con el cuerpo de Helena, como hizo Eneas con el cuerpo de Italia, como hizo Hernán Cortés con la piel de México y Pizarro con la del Perú y más aún Amundsen con las gélidas texturas de lo más Sur. Si fuera así, si mi culpa fuera tan horrenda y natural, si por ella me habéis traído aquí, ¡Oh Dioses suaves! mantenedme aquí, sepultadme bajo el suave manto de la nieve y que ella cautive mi piel y la traspase y hiele mi músculo y llegue hasta mi hueso y lo detenga. Moridme, Dioses, en esta cima. Moridme.
Ventanas
Seriales
Aforismos
Agosto 2013
Apuntes
Archivo 2008
Archivo 2009
Asturias
Carta a una desconocida
Citas del mes de mayo
Colección
Derivas
Desenlace
El Brillante
El espejo
El mes de noviembre
El viaje
Ensayo sobre La Conspiración
Escritos de Isaac Alexander
Haiku
Jardines en el bolsillo
La mujer de las areolas doradas
La Solución
Las manos
Libro de las soledades
Listas
Marea
Meditación sobre las formas de interpretar
Mosquita muerta
No fabularé
Perdido en la mudanza (lost in translation?)
Recuerdos
Reflexiones
Reflexiones que Olmo Z. le escribe a su mujer en plena crisis
Sincerada
Sinonimias
Sobre la música
Sobre la verdad
Sobre las creencias
Tasador de bibliotecas
Velocidad de escape
¿De Isaac Alexander?
Archives
Últimas Entradas
Enlaces
© 2008, 2009, 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015, 2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022 de Fernando García-Loygorri, salvo las citas, que son propiedad de sus autores
Cuento
Tags : La Solución Redactado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 28/12/2010 a las 18:32 |