Domingo a la vuelta de mayo cuando el verano avanza a marchas forzadas y

Redactado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 27/05/2012 a las 17:37

Escena única


ELLA tumbada en una hamaca.
EL riega el césped.
LOS GATOS dormitan en lo alto del tapial.
LOS PERROS siestean.

ELLA: (Con los ojos cerrados)
Bésame.

EL deja la manguera abierta sobre el césped. Se acerca a ELLA. La besa en la boca.

ELLA: (Con los ojos cerrados)
Bésame otra vez.

EL la besa de nuevo.

Se levanta el AIRE del final del día.
Canta un MIRLO macho. Responde cerca la HEMBRA.

ELLA abre los ojos.
EL sonríe y le acaricia la mejilla derecha. Se separa de ella. Coge de nuevo la manguera. Se acerca a una encina.

ELLA:
Dime cuánto dura esta dicha. Dime cuánto dura esta brisa. Cuánto dura tu espalda, recta, mientras riegas. Dime cuánto dura el canto del mirlo. Si tardará mucho en llegar la noche. Si me mirarás mientras me desnudo y luego, cuando me meta en la cama, me abrazarás hasta dolerme. Dime si vas a apretarme hasta dolerme.

EL frente a la encina, de espaldas a ella, escucha sus palabras.
Un GATO se despereza.
Un PERRO, el menor, termina de siestear y busca un juego.

ELLA: (Cierra los ojos de nuevo. Se recuesta)
Estamos solos.

EL termina de regar la encina. Cierra el grifo de la manguera.
La tarde se serena.

Teatro | Redactado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 27/05/2012 a las 17:37 | {0}